Cada día empezamos de cero.
Nunca recuerda que le quiero.
Toda una vida vivida
Y al final, todo
se olvida.
Extraños le saludan
de forma entregada.
No recuerda nada.
Incomodado por el pasado
que no coincide con el presente;
Sus impulsos desordenados,
le mienten.
Un padre que ahora es hijo,
Un niño reconvertido,
Recuerdo los paseos
sin rumbo fijo.
Mil sitios
donde nos hemos
perdido.
Crecía con tu cariño,
Ahora envejeces omiso.
El olvido vive contigo
y el pasado,
revolotea a mi
lado.
Te echo de menos,
aun estando aquí ahora.
Me añoras,
pero no nos conocemos.
A veces nos ponemos de acuerdo,
Y vivimos un instante cuerdo…
Comencemos por el principio,
Aunque mañana dé lo mismo.
Compartamos un indicio
de algo… en el
abismo.
Te echo de menos,
Aunque nos miremos.
Imagino lo que signifique
mi abrazo anónimo.
Vivo sin identidad;
Compañero homónimo.
Si la vida nos olvida,
que la mente nos recuerde.
Si padecemos su ira,
Mejor comenzar a conocerse.
Que las penas en compañía,
Ni son tuyas,
ni son mías.
Te echo de menos,
aun estando aquí ahora.
Me añoras,
pero no nos conocemos.
Imagen y Texto Txema Pinedo,
J.M.L
Espero nunca olvides que te quiero.
5 comentarios:
Lo bueno nunca acaba si algo te lo recuerda...dicen.
El alzeimer es realmente una de las peores enfermedades que una persona puede padecer.
Te felicito por tu trabajo.
Gracias por vuestros comentarios, es duro ver como su mundo desaparece y con el su razón de ser.Constancia ante el olvido...
Espectacular la foto. Y los poemas, dicen, sencillos, auténticos versos de poeta popular -la semana pasada leía la oda a los poetas populares de Neruda (nada que ver con el PP), a ver si la encuentro:
http://www.poemas-del-alma.com/pablo-neruda-oda-a-los-poetas-populares.htm
gracias Javi por tu aporte, un detalle!
Publicar un comentario